Texto argumentativo. Trastorno de oposición desafiante. Por: Beltrán Castañeda María Guadalupe
El riesgo de perder el
control de tus emociones: Trastorno de oposición desafiante
¿Has pensado qué tanto es que logras controlar tus
emociones? ¿Cuántas veces al día te dejas llevar por impulsos y cuántas te has
detenido a pensar cuál es la mejor forma de reaccionar a situaciones
complicadas en tu vida?
Hay personas que no son capaces de tomar un control y
desarrollan trastornos o enfermedades psicológicas, que en algunos casos
terminan representando un problema grave para su desarrollo óptimo o el de las
personas que los rodean.
Un ejemplo de ello es el trastorno de oposición
desafiante, también conocido como trastorno
negativista desafiante (TND) que es un patrón recurrente de conductas
desafiantes, no cooperativas, negativas e irritables hacia padres, profesores y
otras figuras de autoridad. Se trata de niños y adolescentes desafiantes que se
irritan y pierden el control con facilidad, es más frecuente en hombres y suele
iniciar en edad escolar primaria, aunque también puede comenzar desde el
preescolar; dura por lo menos seis meses, durante los cuales se presentan
conductas como cólera, susceptibilidad, sentimientos de venganza, entre otros.
Éste afecta aproximadamente de 2 a 16 niños y adolescentes de cada 100.
El trastorno provoca deterioro clínicamente
significativo en la actividad social, académica o laboral y parece molestar más
a la gente que rodea al niño o adolescente que lo padece que a él mismo. Puede
provocar problemas en la relación con los amigos y una percepción de las
relaciones humanas como algo insatisfactorio, reducción del rendimiento
académico, y como consecuencias secundarias puede provocar baja autoestima,
escasa tolerancia a la frustración, ánimo deprimido y estallidos de enojo.
Es difícil lograr un control completo de lo que sentimos
y de la manera en que esto impacta en nuestras acciones, pero esto pone en
prueba una vez más la importancia del desarrollo de habilidades
socioemocionales desde la edad temprana, pues esto nos ayuda a expresar
nuestras opiniones, sentimientos y necesidades, lo que nos ayuda a lograr una
mayor integración social, emocional y laboral, situación de suma importancia,
pues las relaciones humanas son primordiales en nuestro desarrollo.
Aprende a controlar tus emociones, y no dejes que
ellos te controlen a ti.
Por: Beltrán Castañeda
María Guadalupe
Comentarios
Publicar un comentario